Armariz - Infraestructuras básicas

Armariz – Primeros pasos hacia la modernidad – Infraestructuras básicas

En otras entradas de este blog ya he hecho referencia al aislamiento y las condiciones de vida primitivas en nuestra parroquia hasta la segunda mitad de los años 50 del pasado siglo, que, por consiguiente, no voy a repetir aquí. Esta situación de subdesarrollo solo empezó a cambiar cuando se construyeron las primeras infraestructuras que nos comunicaron con el resto del mundo. Estos hitos esenciales no fueron otros que la construcción de la primera carretera y la llegada de la luz eléctrica. 


Para leer el articulo completo clicar en "Seguir leyendo" que figura a continuación.


Carretera de Armariz en 2009 después de la última remodelación


La carretera permitió el acceso a nuestro pueblo de camiones y vehículos de turismo que acercaron productos y servicios, antes inaccesibles, o solo posibles en condiciones muy penosas a través de empinados senderos y estrechos caminos de carro. La luz eléctrica permitió un mejor aprovechamiento del tiempo en las largas noches invernales, cambiando drásticamente hábitos ancestrales. La llegada de las primeras radios acercaron la realidad del mundo desarrollado a nuestras vidas, además de aportarnos el disfrute de la música, antes solo posible en las fiestas patronales y el baile dominical.

El objetivo de este artículo es detallar, de forma más precisa, lo que supuso la construcción de estas infraestructuras y significar la gran contribución del pueblo a su ejecución, además de resaltar los actos políticos que se programaron para inaugurar oficialmente estos importantes medios de progreso. Al mismo tiempo, considero que puede ser de interés recordar el acto político organizado para oficializar estas realidades, reproduciendo en el Anexo II, a continuación de esta introducción, el artículo periodístico del diario “El Pueblo Gallego”, del jueves 8 de mayo de 1958, donde se relata este evento vivido como una gran fiesta celebrada en el entorno del Monasterio de San Esteban. Yo recuerdo perfectamente algunos detalles de ese acto al que asistí con mi familia a punto de cumplir los ocho años de edad.

Aunque la carretera se inauguró oficialmente en mayo de 1958, la realidad es que ya estaba parcialmente operativa en 1956, al menos el tramo Armariz-Covas, lo que ya permitía la circulación del camión del “Couche” para comunicarnos con Orense capital. También se cambió el lugar de acceso al coche de línea, pasando a cogerlo en Covas en lugar de Faramontaos, ya que era más cómodo caminar por la carretera hasta la parada en lugar de hacerlo a través de caminos embarrados.

La construcción de la carretera se hizo con medios técnicos mínimos, donde la simple mano de obra fue el elemento esencial. Los afectados por el paso de la carretera contribuyeron con la entrega de los terrenos, sin ningún tipo de compensación económica, en una época en que las fincas eran esenciales para la subsistencia de las familias. El pueblo contribuyó adicionalmente con su trabajo personal además de aportar los carros para el movimiento de materiales. Solo al final se pagaron unos modestos jornales. Yo no recuerdo haber visto ningún tipo de maquinaria, sino solo carros, carretillos con piedras, mazas para deshacer las piedras y consolidar el firme, picos y palas, además de algún barreno para volar rocas que obstaculizaban el trazado. Al margen del autobombo político, la verdad es que la aportación del propio pueblo supuso la mayor parte del coste de la construcción. Como ya se indica en los discursos del acto político celebrado en San Esteban, todavía tardaría nuestra carretera en ser dotada de un firme compactado, labor a realizar por la Diputación, que todavía no había acogida la carretera bajo su control y gestión.

También la llegada de la luz eléctrica coincidió con la apertura de la carretera, ya que ésta fue un elemento esencial para permitir el transporte de los distintos materiales necesarios para su instalación. Los postes, bobinas de cable de cobre, materiales para el transformador y demás elementos necesarios, fueron transportados por la nueva carretera para su acopio y montaje. Sin carretera no hubiera sido posible la llegada de la luz eléctrica.

La llegada del fluido eléctrico a nuestra parroquia se produjo en 1956, como se acredita con la bendición, y posterior inauguración del transformador por el gobernador, según se recoge en el artículo del diario “La Noche” del jueves, 13 de septiembre de 1956, que transcribo a continuación en el Anexo I. En nuestra parroquia se construyó un transformador en Cardares, hoy desaparecido. Era una construcción en ladrillo, revocado y pintado de blanco, de planta cuadrada de aproximadamente un metro y medio de lado, de unos tres metros de altura con un tejadillo a dos aguas y una portezuela de chapa con el símbolo de la clásica calavera con la indicación de ¡PELIGRO!. Allí llegaban los cables de alta tensión y de allí salían para la distribución domiciliaria a 125 voltios. No tengo datos del coste que para cada familia supuso el alta en el suministro de luz, aunque debió ser bastante elevado, como por otra parte reconoce el propio gobernador en el discurso reproducido en el Anexo II.

Detalle del diario La Noche del 13 de septiembre de 1956, transcrito en el Anexo I

En resumen, tanto la construcción de la carretera como la llegada de la luz eléctrica, no fueron una concesión de las instituciones públicas para mejorar el nivel de vida de unos aldeanos subdesarrollados, como hubiera sido de justicia para compensar la contribución impositiva pagada por el pueblo llano durante décadas. El pago de impuestos y hombres para el ejército y la guerra durante siglos, no tuvo nunca compensación alguna en inversión pública para los moradores de estos pueblos, que bien merecido tenían unas infraestructuras mínimas que facilitaran su trabajo y propiciaran la creación de riqueza. Por el contrario, una vez más, la parte mayoritaria de la inversión debió ser pagada por los beneficiarios, tanto en dinero como en prestaciones o cesión de terrenos. Una injusticia histórica con los más desfavorecidos, perpetuada hasta bien entrados los años setenta, con el advenimiento de la democracia y la consolidación del desarrollo económico español, al que tanto contribuimos todos.

No cabe duda que la comunicación viaria por carretera y la luz eléctrica universal eran un objetivo político del Régimen para la España rural. También es cierto que después de la destrucción del país por la guerra civil, el aislamiento internacional y los duros años del hambre, las condiciones no eran las óptimas para enmendar carencias históricas. En esos difíciles años la política económica del gobierno priorizó las necesidades de las zonas industriales respecto a las más necesitadas  del entorno rural. Esta cruda realidad tampoco era una excusa, ya que la aportación de recursos públicos fue muy limitada, siendo la mayor carga a costa de los propios vecinos de los lugares afectados. Tampoco se tuvo en cuenta la contribución de nuestra tierra a la producción de energía eléctrica y las cuantiosas remesas de divisas de los emigrantes, empleadas en beneficio de las zonas industriales en detrimento de sus naturales beneficiarios. En cualquier caso, la puesta en marcha de las iniciativa comentadas supuso un paso esencial para salir de una situación de aislamiento secular, que de otro modo nunca se hubiera producido.

Una vez concluida la electrificación del municipio se organizó un gran acto en el Monasterio de San Esteban, para dar publicidad a las metas alcanzadas, presentándolos como logro del Régimen después de décadas de abandono. Se pusieron a disposición de los distintos pueblos autobuses que llevaron a todos aquellos que quisieron asistir hasta el lugar del acto. Las fuerzas vivas de la parroquia, es decir, el cura y el maestro, animaron a todo el mundo a asistir, y dado que era una oportunidad festiva de ver algo novedoso, la afluencia fue masiva. Ya he dicho que yo acudí a ese acto con mi familia, donde escuchamos los discursos que pronunciaban los políticos desde una tribuna montada en el exterior del monasterio, decorada en todo su contorno con una banda con la bandera nacional y adornada con ramas a modo de arco triunfal. Profusión de banderolas y banderas en todo el recinto. Los discursos eran amplificados con varios altavoces estratégicamente situados. Se aplaudió generosamente a los intervinientes, aunque sin entender en su totalidad la palabrería de los políticos. Tanto a la llegada de las autoridades como al final de acto se lanzaron abundantes cohetes. Había en el recinto de la plaza varias casetas con bebidas y bocadillos, igual que en las fiestas. Lo que no recuerdo es si había una banda de música, aunque lo más probable es que si, para después del acto amenizar a los asistentes con unos bailes.

Después del acto se ofreció un vino español en los claustros del monasterio, donde se montaron unas largas tablas sobre caballetes, cubiertas con manteles blancos sobre los que había platos conteniendo rodajas de embutido, aceitunas y poco más. A este aperitivo solo asistían las fuerzas vivas de las parroquias asistentes. Yo tuve oportunidad de verlo porque me lo enseñó mi tío Pepe, que acudía con su hermano D. Manolo, el cura de nuestra parroquia.

Como ya he indicado, en una primera etapa la carretera de Covas-Armariz-Loña se ejecutó según un proyecto técnico realizado por los técnicos de la Diputación, pero solo a expensas del ayuntamiento y de los vecinos. El ancho de la carretera era de cinco metros, con tres y medio de calzada de rodadura y setenta y cinco centímetros a cada lado como arcén, además de las correspondientes cunetas para evacuación de las aguas pluviales. En 1960 los técnicos de la Diputación realizaron el replanteo definitivo y tomaron bajo su control la finalización de la carretera, que se ejecutaría en los años siguientes según disponibilidad presupuestaria. El firme era del tipo “macadám”, con áridos de distinto calibre superpuestos, para terminar con una capa de arena compactada.

Aún hubo que esperar a los años setenta para que el firme recibiera un riego asfáltico, que alargara su uso antes de la aparición de los molestos baches. La actual carretera OU-510, de Loñoá-Armariz-Loña, de la Red Provincial, reúne unas condiciones óptimas, tanto de anchura como de firme y señalización, modernización que no se ejecutó hasta el año 2.000, ensanchándola hasta los seis metros y medio de firme, más cincuenta centímetros de arcén, totalizando siete metros de anchura.

Típico transformador de los años 50s, no muy distinto del de Armariz


Anexo I - Diario “La Noche” – Jueves, 13 de septiembre de 1956

Completada la electrificación del Ayuntamiento de Nogueira de Ramuín.

ORENSE. (De nuestro corresponsal). Una nueva electrificación de nueve aldeas en Armariz, del Ayuntamiento de Nogueira de Ramuín viene a completar la importante labor realizada en este orden de mejoras rurales, de tres años a esta parte, en el citado municipio, que lleva invertidas más de millón y medio de pesetas en las mismas, con 66 localidades que ya disponen de fluido eléctrico del que se benefician más de seis mil habitantes y restando solamente 20 lugares para conseguir que todo el Ayuntamiento lo obtenga, y en los cuales ya se viene trabajando activamente para conseguirlo.

Con motivo de los actos organizados en Armariz, se desplazó a esta ciudad el Gobernador civil y jefe provincial del Movimiento señor Albert Rodríguez, acompañado de jerarquías provinciales, que presidieron la bendición de los nuevos transformadores, que llevan la energía eléctrica a las parroquias de Armariz, San Miguel del Campo, Cerreda, Nogueira, Viñoás, Loña, Rubiacós, Faramontaos y Villar, en un acto público en el que intervino el alcalde de Nogueira de Ramuín, quien hizo un resumen de la labor realizada, señalando que con diversas aportaciones de la Diputación, Obra Sindical de la Falange, hijos del pueblo residentes en Méjico y prestación personal de los vecinos, se pudo cubrir el presupuesto de las obras. También hizo uso de la palabra el señor Albert, quien destacó que con esta inauguración se llegaba a la cifra bien expresiva, de 544 pueblos electrificados en la provincia, en menos de tres años. Hizo patente su agradecimiento a todas las autoridades  que tanto celo ponen en la gestión que se les ha encomendado y a cuantos han ayudado de modo tan efectivo para su realización.

D. José Luis Albert Rodríguez, Gobernador Civil de Orense en 1953-1958

Anexo II - El PUEBLO GALLEGO - Jueves, 8 de mayo de 1958

BALANCE DE UNA TAREA

Doscientos millones de pesetas ha costado la electrificación de mil pueblos

Concierto de voluntades en esta obra ingente y popular

Desde ayer tarde, quince pueblos más de la zona rural de nuestra provincia cuentan con luz eléctrica. El hecho, que por lo habitual es una nota de continuidad en la labor no merecería honores de acontecimiento extraordinario si no se diese una circunstancia excepcional, la de que con ello se alcanza el número mil de las electrificaciones en esta etapa desde 1.953 en que el gobernador civil ha impulsado esta obra, muy necesaria por cierto.

Estos pueblos son San Esteban, Cerdeirinas, Viduedo, Pombar, Paradela Cousos, Covelo, Monteverde, Alcouce, Sobado, Cinseiro, Villasuja, Río Cabe, Acevedo y la Cruz.

Con el gobernador civil señor Albert Rodríguez, emprendieron la marcha hacia Nogueira de Ramuín el arquitecto señor Alex, en representación del Presidente de la Diputación, alcalde de la ciudad señor Saavedra Sánchez, ingenieros señores Vega Escandón de la jefatura agronómica, Casares Ortiz y Olaizola de Obras Públicas, Colavides de Industria; los señores Cabezas y Hentschel de Fenosa, Liaño y Pato delegados de sindicatos y Frente de Juventudes, y otras representaciones.

INAUGURACION DE UN CAMINO

En Ferradal se inicia un camino de nueva construcción, que pasando por Armariz llega hasta Loña del Monte, con una longitud de siete kilómetros.

Aquí era esperado por el alcalde de Nogueira señor Blanco, secretario del ayuntamiento señor Gómez Masid, delegado de Prensa señor Alvarado y otras representaciones y entre aplausos cortó la cinta simbólica abriéndolo al paso, y continuando después por otro camino que también inauguró de 10 kilómetros que desde Loña va hasta Luintra. Aplausos de los numerosos vecinos que se congregaban en la carretera, profusión de cohetes, hasta Luintra en donde se repitieron las manifestaciones de simpatía, dirigiéndose hasta San Esteban deteniéndose a la altura del transformador que iba a bendecirse.


RECIBIMIENTO ENTUSIASTA - BENDICION DEL TRANSFORMADOR

Cerca del transformador esperaba a la primera autoridad civil de la provincia, la Corporación municipal y consejo local, los hermanos Álvarez, hijos de Nogueira de Ramuín residentes en Méjico, que con otros emigrantes del municipio contribuyeron con sus donativos a la realización de estas obras, comisiones de electrificación de San Esteban y Moura, ingeniero de Saltos del Sil, doctor García Roselló, cabildo de la Hermandad de labradores y ganaderos, alcaldes de Pereiro de Aguiar y Parada del Sil, y párrocos de la comarca y numerosos vecinos.

Bendijo al transformador el párroco de San Esteban y el gobernador civil hizo las conexiones para dar luz a los quince pueblos que desde ayer disfrutan de este beneficio, y que completan así la electrificación total de la comarca de Nogueira de Ramuín.

ANTE EL MONASTERIO DE SAN ESTEBAN

Seguidamente autoridades, representaciones y gentío fueron hasta el monasterio de San Esteban de Ribas de Sil, que ofrecía en sus alrededores un grandioso aspecto.

Coincidió allí una excursión de alumnos del Colegio Menor Calvo Sotelo, con su director señor Eiras Roel, y que después de haber visitado el Monasterio se sumaron al acto.

Cinco millones de pesetas en la “Cuna del Afilador”

Ante el monasterio se había levantado una tribuna, y desde ella habló en primer término el alcalde de Nogueira de Ramuín, que pronunció las siguientes palabras:
«Excmo. Señor Gobernador civil; Excelentísimas o Ilustrísimas Autoridades y representaciones diversas; Señores y camaradas:
Bienvenidos, y para todos un cordial saludo de la tierra “Cuna del Afilador”, con el agradecimiento del Ayuntamiento y vecindario de Nogueira de Ramuín, por el alto honor que nos dispensáis con vuestra visita, al distinguirnos, no solamente con motivo de una inauguración más de electrificación de nuestros pueblos, sino con el de celebrar haber cubierto el número mil de electrificaciones de alumbrado a otros tantos pueblos. Bien puede estar de enhorabuena la provincia con la labor llevada a cabo por la Primera Autoridad en el transcurso de cuatro años de su mandato al frente de la misma, ya que los frutos de su actuación en todos los órdenes, prestigian en grado sumo la brillantez da una gestión. Y, Nogueira se honra en reconocerlo así, y hace público el agradecimiento que debe a tan celosa autoridad.

Celebramos hoy la feliz coyuntura de la terminación de las obras de electrificación de quince pueblos que quedaran sin este servicio, con la puesta en marcha de dos transformadores más, quedando completa la total electrificación de los 108 pueblos del municipio. Fiesta grande, prestigiada con la presencia de relevantes Jerarquías y Representaciones.

Estamos orgullosos de la culminación de la obra realizada, que hemos podido llevar o cabo, gracias:

1º Al Excmo. Señor Gobernador Civil, que en todo momento ha dispensado la mayor acogida a nuestras demandas, facilitándonos subvenciones de la obra Benéfico-Social del Movimiento, cupos de cobre de la Junta provincial de Electrificaciones Rurales, y animándonos siempre, y especialmente en las diez visitas realizadas al municipio con motivo de estas inauguraciones.
2º A la Excma. Diputación provincial, por la subvención de 25.000 pesetas.
3º Al Instituto Nacional de Colonización, por las diversas ayudas, que totalizan 515.191 Pesetas.
4º A los hijos del Ayuntamiento residentes en América, que nos ayudaron con entregas por la cantidad de 180.000 Pesetas.
5º A Fenosa, por las facilidades y aportaciones con que ha contribuido.
6º Y a “Saltos del Sil” por sus donativos en materiales y máquinas de transformación en las parroquias de Villar y San Esteban.

Con estas ayudas, las aportaciones de los vecinos, las de la Hermandades de labradores y Ayuntamiento, dentro de una economía pobre, gracias al entusiasmo y sacrificios que nos impusimos, pudo realizarse esta obra, que no dudamos en calificar de grandiosa en relación a nuestras disponibilidades, y de su importancia dan idea los siguientes datos:

a) se electrificaron 108 pueblos diseminados en trece parroquias.
b) Se construyeron doce transformadores.
c) Se tendieron 28 kilómetros de línea de alta tensión, y más de 30 de líneas de baja y distribución en los pueblos.
d) Se emplearon 18.975 kilogramos de hilo de cobre.
e) Y se invirtió en las obras la cantidad total de 5.000.000 pesetas.

CAMINOS VECINALES
Aprovechamos este acto para dejar constancia de la inauguración de dos caminos vecinales de la mayor importancia para el municipio:

El de Luintra, por Rubiacós a Loña, enlazando con el de Rocas a Esgos, de 10 kilómetros.

Y el de Loñoá, por Armariz a Loña, que enlaza otros dos caminos vecinales de 7 kilómetros.

Venían incluidos estos caminos en planes de la Diputación, en espera de turno para su construcción, habiéndonos decidido a llevar a feliz término su ejecución a medio de lo prestación personal de los pueblos y las ayudas siguientes:

1º La Diputación, facilitando el estudio por su cuenta de los respectivos proyectos técnicos, con la constancia de nuestro reconocimiento para la expresada entidad, y especialmente para los señores Ingenieros, Jefe de Obras Públicas señor Casares, y de Vías y Obras de la Diputación señor Olaizola, por las facilidades, diligencia y cariño que dispensaron a su realización.
2º El filántropo benefactor e hijo del municipio, don Cesáreo González Rodríguez, que nos ayudó con la cantidad efectiva de 200.000 pesetas.
3º Otros hijos del Ayuntamiento en América y don Eduardo Barreiros Rodríguez, que nos donaron cantidades por 260.000 Ptas.
4º La Hermandad de Labradores y el Ayuntamiento, que aportaron cantidades por 170.000 Ptas.
5º Y los vecinos de los pueblos interesados, cediendo gratuitamente los terrenos, facilitando prestación personal y de transportes, así como aportaciones metálicas, que totalizan 2.650.000 pesetas.

Del primero de estos caminos se hizo cargo la Diputación provincial, que completó su terminación, hallándose actualmente en servicio y facilitando la circulación magníficos ómnibus de viajeros, con la riqueza que supone la facilidad de salida de maderas y otros productos de los pueblos. Y el segundo, construido de explanación y obras de fábrica, a falta solamente de afirmado, aunque en condiciones de transitar por el mismo toda clase de vehículos, agotadas nuestras posibilidades esperamos que la Diputación, como en el primero, se hará asimismo cargo de su terminación, y en tal sentido formula este ruego al Ilmo. Señor Presidente que nos honra con su visita en este acto.

Y termino, con el voto de nuestra inquebrantable adhesión al Caudillo, que con su salvadora gesta hizo posible el engrandecimiento de la Patria, una, grande y libre: ¡Viva Franco! ¡Arriba España!

EL PARROCO DE SAN ESTEBAN
Dijo después unas breves palabras el Párroco de San Esteban, señor Gómez Bertólez, que agradeció la presencia de las autoridades que promovieron tan importante mejora, y señaló el aspecto cristiano de la fiesta, destacando la importancia de la luz, principio del mundo y signo de progreso, y terminó exhortando al uso de la ciencia para los fines de Dios.

Artículo transcrito del diario El Pueblo Gallego de 8 de mayo de 1958

Fue muy aplaudido, hablando después, el gobernador civil de la provincia don José Luis Albert.

“Si en 1953, hubiéramos sabido que la electrificación de 1000 pueblos costaba 200 millones, ni vosotros ni yo, nos hubiéramos atrevido a poner en marcha este programa”

Autoridades provinciales y locales, hombres y mujeres de Nogueira de Ramuín y de la provincia de Orense aquí presentes en este acto. Abrumado por las montañas que nos circundan y también por el impresionante Monasterio de San Esteban del Sil, sobre el que nos apoyamos esta tarde para dirigiros la palabra, monasterio que en su fachada central tiene el escudo con la doble águila exponente de la época más gloriosa de nuestro Historia, y abrumado también, porque no decirlo, por la emoción que tiene que embargarme al llegar a este momento después de numerosas dificultades, de que podamos decir a la provincia de mi mando que hemos cumplido por lo menos una etapa en la marcha por el bienestar de todos los hombres y mujeres de esta tierra española, abrumado digo, siento que quizás mis palabras no puedan estar a tono con el momento trascendental e importante que estamos celebrando.

Porque si es Nogueira de Ramuín ayuntamiento en el que celebramos la inauguración de los mil pueblos a los que llevamos la luz, y son estas gloriosas piedras las que nos cobijan en la celebración de este acto, nos dirigimos esta tarde de una manera particular a toda la Provincia de Orense, y diría también, y permitidme esta vanidad, que de una manera general a España entera.

SIGNIFICACION DEL ACTO DE HOY

Yo estuve pensando cual sería el tema con que iba a dirigir esta tarde unas breves palabras o quienes quisieran escucharme con motivo de este acto. Y no quise pensar en repetir lo que tantas veces vamos diciendo por los pueblos de la provincia, y es que gracias a ellos, gracias a su unidad, gracias o su sacrificio, venimos nosotros, desde la capital de la provincia a celebrar con ellos la inmensa satisfacción que significa para sus espíritus, para sus cuerpos, para su ilusión y para su esperanza tantas veces sentida y tantas veces malograda, conseguir disponer de una bombilla en las casas modestas de los pueblos de nuestra provincia.

Pero he pensado que debemos de buscar esta tarde otro tema distinto, y es el de ofrecer a nuestra provincia de Orense la significación de la electrificación de los mil pueblos, para que se den cuenta los que viven en la capital y aquellos que viven en pueblos que no hemos podido llegar a ellos, y también para que recapaciten y piensen aquellos que en el transcurso de estos cinco años, para disfrutar con ellos en una tarde cualquiera de la inauguración de la luz eléctrica, lo que ha costado y lo que ha supuesto esta labor verdaderamente ímproba de lograr el resultado que en este momento estamos celebrando.

EL ECO DE UNAS CONSIGNAS

El Caudillo de España dio la orden de elevar la riqueza potencial de Orense en lo posible, y aumentar por consiguiente el nivel de vida de los pueblos, llevando la luz a las casas de los campesinos de esta provincia, una de las que más energía eléctrica producen en España.

Y no era cosa de que las torres metálicas, que saliendo de las fábricas de electricidad, transportan esta fuente de energía a las poblaciones importantes de la nación, y aun del extranjero, no dejara al menos una parte en la misma provincia. Mas para ello, era preciso un gran esfuerzo de todo orden, económico, moral de tesón y de voluntad por parte de todos aquellos que teníamos en nuestra mano, bajo nuestra responsabilidad, el medio de logar un resultado eficiente en el menor plazo posible.

Os recordaré también que, siguiendo las consignas de nuestro Jefe del Estado, de nuestro Generalísimo, de nuestro Caudillo, del hombre que dirige los destinos de la Patria por los camino de grandeza que todos estamos presenciando, y cuyo exponente es precisamente esta tarde, solicitamos del Ministro de Industria don Joaquín Planell que nos apoyara y nos ayudara con todos los medios que el Ministerio podía poner a nuestra disposición.

Carretera de macadám, del tipo de la inicial de Armariz, una vez terminada

EFICACES COLABORACIONES

Y así tenemos en este momento de poder decir a todos vosotros, que gracias a las gestiones realizadas por la autoridades provinciales cerca del señor Ministro de Industria en el hall del Hotel Finisterre de La Coruña, se crearon las Juntas de electrificación rural para toda España, que han sido el motor, que han sido la organización administrativa, que han podido lograr que llegáramos al resultado que estamos celebrando esta tarde. También, y acompañado siempre de las autoridades provinciales y de los técnicos a nuestra disposición, visitamos el Ministro de Agricultura, los distintos ministros que en esta etapa de mando hemos conocido, pidiéndoles el apoyo del Instituto de Colonización para que pudiéramos llevar a cabo esta obra que teníamos bajo nuestra responsabilidad, y con órdenes superiores recibidas.

Del Instituto de Colonización habéis recibido todos vosotros todos los pueblos de la provincia de Orense que están ya electrificados cantidades importantes como subvención como crédito.

Recibimos de la Diputación Provincial, recibimos y recibisteis todos vosotros, y no sabéis a costa de cuanto esfuerzo, cantidades pequeñas, pero que en aquellos momentos suponían un medio de impulsión extraordinario de la obra Benéfico-social del Movimiento, esta Institución modesta económicamente, pero que impulsa todas las posibilidades de renovación, de creación y de elevación del nivel de vida de nuestra provincia, de nuestros pueblos, como un motor de pocos caballos pero de una gran resistencia y de una fuerza y de una potencia interna extraordinaria.

Y recibimos de las Hermandades las aportaciones también modestas, porque también nuestras Hermandades son pobres en nuestra provincia, para que fuesen uniéndose esos pocos al grupo principal que constituye lo que es el fondo económico de estas electrificaciones, cuya inauguración en Nogueira de Ramuín supone este acto que estamos celebrando, y que han sido vuestras aportaciones, las aportaciones de los vecinos, las aportaciones de aquellos que iban a salir beneficiados, pero que sabemos todos que en la inmensa mayoría de los casos era un sacrificio extraordinario de carácter económico, porque nos consta que cientos de familias han tenido que solicitar préstamos de amigos o familiares a pagar en plazos más o menos largos, porque ni siquiera esta aportación que tenían que presentar y ofrecer disponían de ella.

200 MILLONES DE PESETAS

Para que os deis cuenta todos, os diré que no exagero nada la cifra si calculo que esta obra ha supuesto aproximadamente doscientos millones de pesetas. O sea, que la electrificación de los mil pueblos de la provincia suponen 200.000.000 de pesetas, obtenidos de unos y otros organismos, y de los propios beneficiarios, y que esta es la más importante de las significaciones de esta fiesta que celebramos esta tarde al inaugurar esta electrificación: ofrecer que calladamente, como si no hiciéramos nada, hemos gastado doscientos millones de pesetas de una manera sencilla y simple, obteniendo la mayor cantidad de estos, de las propias economías de las propias familias beneficiarias de estas electrificaciones.

Y es un asunto importante. Yo me felicito en estos momentos, y os lo digo y permitidme que me envanezca de ello, como uno más de los que han participado y participan en esta electrificación porque es una cantidad muy importante, tan importante que yo me atrevo a deciros que si el año 1953 yo hubiera ofrecido a la provincia de Orense la electrificación de mil pueblos a costa de tener que aportar doscientos millones de pesetas, es posible que ni vosotros ni yo nos hubiéramos atrevido a poner en marcha este imponente programa de esta importancia económica tan grande.



BOE del 02/05/1953, nombrando a J.L.Albert Gobernador de Orense

GRATITUD

Y poco mas, deciros que en estos momentos doy los gracias a las numerosas comisiones de electrificación de todos los pueblos que participaron en esta transcendental obra. En primer lugar a los alcaldes y jefes locales del Movimiento, a los cuales hice responsables y exigí que pusieran todo su tesón y buena voluntad, diciéndoles que si yo estaba incluso dispuesto a resignar el mando de la provincia si no pudiera llevar a cabo este programa, también exigiría de ellos que estuvieran dispuestos a presentarme la dimisión si no eran capaces de llevar a cabo la electrificación de su propio ayuntamiento.

Doy las gracias también a los señores párrocos, cuantas veces he de decirlo y tantas cuantas lo diga siempre serán pocas. Estos sacerdotes, jóvenes la mayor parte de las veces, formando parte de las comisiones, animosos y emprendedores, deseosos de que se llevara a cabo esta obra, porque sabían que con ello iban a lograr no solamente la felicidad material en lo posible de sus feligreses, sino también saber que se acercaba un poco más a Dios todos los días, como tan bien explicaba hace un momento el señor cura párroco de Nogueira de Ramuín que os dirigió la palabra.

A los vecinos que quisieron formar parte de las Juntas de electrificación, a sabiendas de que tenían que ir casa por casa, pidiendo aportaciones económicas, recibiendo en unas ocasiones malas contestaciones, en otras insinuaciones muy maliciosas, en otras contestaciones que no eran del todo oportunas, y en todos los casos, como es natural, puesto que pedían un sacrificio económico, retrasos, distinciones, rebajas, pero que ellos, no obstante, echando sobre sus propias espaldas esta ímproba labor, supieron llevar a cabo la consecución de la obra de aquella comarca de la que formaban parte ellos como miembros de una Comisión.

A los técnicos del Ministerio de Agricultura, del Ministerio de Industria, a las empresas, digámoslo claramente, de una manera especial felicitamos en este momento a Fenosa, y a su ingeniero aquí presente con nosotros, director para Orense, que es la entidad que está distribuyendo la energía por la provincia, no olvidéis todos mis queridos amigos al enjuiciar la labor de una empresa, que es un negocio humano como otro cualquiera, y que por tanto, si vosotros en vuestras modestas negociaciones tenéis también que obtener el rendimiento preciso a vuestro trabajo, es justo que las empresas tengan que estudiar de una manera cuidada y atenta todas las posibilidades de una electrificación, puesto que administran bienes que pertenecen a muchos, ya una son sociedades económicas.

Pero no pretendo con esto defender las posibilidades económicas de una empresa sino señalar sencillamente este aspecto, porque muchas veces hemos tenido que salir a destruir cierto razonamiento o argumentos poco acordes con la importancia y la transcendencia de la obra que estábamos llenando a cabo.

Con Fenosa, Saltos del Sil, con Saltos del Sil, estas otras empresas pequeñas unas veces propietarias de modestos saltos, otros veces simplemente distribuidoras de energía eléctrica.


CATEDRAL MODERNA DE LA TÉCNICA

Estamos entre las ruinas de este Monasterio, y casi no podemos verlo porque las montañas nos lo tapan, en cuanto ascendemos un poco estamos viendo esta catedral moderna de la técnica que es el salto de San Esteban.

Al lado de vuestras propias casas están incrustadas en la tierra, colocadas muchas veces con nuestras propias manos como trabajadores de la construcción a las órdenes de las empresas las orgullosos, las torres metálicas que distribuyen la energía eléctrica que se produce en el salto de San Esteban. Estas torres metálicas que veis desde vuestros domicilios, y que os pasmaría pensar cómo era posible que teniendo tan cerca la energía eléctrica, vosotros os alumbrarais con candiles. Pero así es la técnica y así son las cosas.

Ahora ya veis como ha llegado el día y como vosotros habéis disfrutado también de esa riqueza que se produce tan cerca de vuestras propias tierras.

Y voy a terminar. Voy a terminar diciendo que no creáis que esto es un esfuerzo económico exclusivamente. No es un esfuerzo administrativo tampoco, no es un esfuerzo técnico. Con la técnica, con la economía y con la administración posiblemente no hubiéramos inaugurado arriba de cuatro o cinco electrificaciones rurales. No exagero absolutamente nada. Porque hace falta fe, hace falta mucha fe, hace falta tesón, hace falta voluntad, hace falta confianza en sí mismo, hace falta visión de presente y sobre todo visión de futuro, para aventurar la obra que significa la electrificación de un pequeño pueblecito de nuestra provincia.

El señor cura párroco nos decía que nombres famosos, como Volta, habían sido los precursores de esta importancia técnica que significa la energía eléctrica. Yo os digo que hace cincuenta, sesenta años, que se conoce la lámpara eléctrica y sin embargo hasta 1958 no hemos llegado al número mil de electrificaciones en esta provincia.

Y habían pasado muchos años en los tiempos de decadencia de España, de los años de época liberal y los cinco años de república, en los que se prometió el cambio radical de la vida de los españoles. Y tuvimos que venir nosotros, los hombres poseídos de intensa fe en España, en nuestro pueblo y en nuestro futuro, para lograr estas ventajas, y hemos tardado, hemos tardado más de lo que hubiéramos querido, y hemos tardado porque habéis visto en mis primeras palabras la importancia económica de esta empresa, porque salimos vencedores moral y materialmente de nuestra guerra de Liberación, pero vencidos absolutamente en el orden económico, ya que aquellos a quienes derrotamos nos dejaron casi una España quemada, ya que no pudieron dejarnos una España rota.

Y en estas tristes circunstancias de una economía casi de cero, inmediatamente una guerra internacional que nos aisló por completo del Mundo sin que pudiéramos recibir ayuda de nadie, y posteriormente el Mundo entero declarándonos apestados y cerrándonos las fronteras económicas y políticas, para que nos cociéramos en nuestra propia salsa y nos hundiéramos en nuestra propia miseria, tuvimos que levantar a España y tuvimos que llegar a conseguir las cosas con nuestro esfuerzo propio.

Tipo de carretera comarcal, siminar a la actual de Armariz

SENCILLAMENTE, POLITICA
 

Porque este mismo salto de San Esteban, del que os hablaba antes y que tan cerca tenéis, y que muchos de vosotros habéis ayudado a construir, tuvo que estar parada su construcción durante muchos años por el bloqueo de los extranjeros. No necesitáis tener canas, ni ser viejos, para haber conocido esta etapa en que los empresarios tuvieron que decir a los obreros de la construcción del Salto que tenían que marchar a sus casas, porque se paraba aquella obra en la que tanta ilusión había puesto el régimen por elevar el nivel de vida de los españoles.
Y esto, el haberlo conseguido a pesar de tanto esfuerzo, es precisamente porque además de la técnica, de la administración y de la economía había política, sencillamente política, que da fe en uno mismo. Fe en aquello que se siente, fe en España, tener conciencia de nuestra Historia, nuestra triste o magnífica y saber que ella pesa sobre nosotros para llevarnos hacia la grandeza, fe en que todos los que caen en conseguir algún bien para sus semejantes no caen en balde, fe en todos aquellos que mueren defendiendo los intereses eternos de la Patria no mueren en balde, fe también  en que nuestros gobernantes, están poseídos de la misma confianza y fe que vosotros tenéis en vosotros mismos, y que estamos bien dirigidos, fe en que creemos en España, en la España eterna que representan estas ruinas y fe en la España eterna que representa nuestra fe para el futuro, fe en que el futuro será mejor que el presente, fe en que estos niños que me están oyendo en estos momentos sin saber apenas lo que estoy diciendo, porque apenas si entienden mis palabras, van a vivir mucho mejor que nosotros vivimos, mucho mejor de lo que vivieron sus padres y sus abuelos.

Fe en definitiva en que estamos bien gobernados, en que tenemos la razón y que por eso podemos estar firmemente hablándonos así, de cara a cara, sin bajar la vista, vosotros a mí y yo a vosotros, en la seguridad de que estamos cumpliendo con nuestro deber y que estamos haciéndolo bien, no necesitamos cambio de ninguna clase sino seguir los destinos de España, de la manera y de la forma en que queremos que siga los que sentimos a la Patria con los ideales esenciales nacidos el día 18 de julio, y gobernados y dirigidos por este hombre que la Providencia ha puesto a nuestro frente, y que se llama Francisco Franco, que además de tener todas las cualidades que le hacen ser Jefe, tiene una que en esto momento tiene mucho valor para nosotros: la de ser gallego ¡Viva Franco! ¡Arriba España!

Una gran ovación premió las palabras del Gobernador Civil, que fue muy felicitado por su brillante y elocuente intervención.

NOTAS FINALES
En uno de los claustros del monasterio de San Esteban de Ribas de Sil fue servida una copa de vino español.
Más tarde las autoridades y personalidades recorrieron el monasterio, fijándose en las obras de restauración que en el mismo se vienen realizando por el servicio de Defensa del Patrimonio artístico nacional, en colaboración con Saltos del Sil.

El acontecimiento, que ha destacado de modo extraordinario entre todos los realizados hasta la fecha, fue captado en varias películas por el corresponsal de No-Do y de TVE, don Ángel Gutiérrez, corresponsal en Vigo del Noticiario cinematográfico español.
Nuestro redactor gráfico Villar, obtuvo también un reportaje, filmando además una película en color.

No hay comentarios:

Publicar un comentario